Se trata de dos lienzos en los que se trabaja con el concepto de la inercia controlada empleando materiales cuya incompatibilidad se manifiesta precisamente al utilizarlos simultáneamente. Se producen acciones de separación entre los pigmentos cuya base es acuosa y otros cuyo medio es oleoso. Ambos se repelen entre sí y se agrupan en su propio espacio de confort. Asimismo, se introducen técnicas en seco y veladuras de color.